Ella

Solo un pedazo de hoja que el viento se llevo, solo eso quedó y el recuerdo del café de su mirada, ella ni siquiera volteo a verme, su gabardina color ocre se perdió en aquel café típico de las tardes de verano.

Atónito me preguntaba y el silencio no respondía, ante mi vista se asomo un resplandor, un liquido cristalino bajo por mi mejilla y cayo al suelo.

Las hojas se desprendían con facilidad de los arboles a causa del viento, así mis lágrimas inundaban el suelo con su salinidad por la despedida de ella, ella, la mujer de mi vida.

Si te gustó, ¡compártelo!

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.