LA BELLA Y LA PANDEMIA. (DÍA 4)

-Día 4- 

En la tarde me encuentro con la noticia de que Colombia va a tomar medidas preventivas por el virus, entre ellas el cierre de fronteras por un periodo de 30 días.  — Se están tomando las cosas en serio —, le digo con alivio a Line que me pregunta por la situación en mi país. Pero cuando me quedo finalmente sola en la cocina hago lo que puedo por ignorar la insoportable angustia que me genera pensar esa puerta de regreso cerrada así sea por algunas semanas.  

Cuando Estella llega a la cocina estoy sentada mirando hacia la nada. En ese momento no quería hablar con nadie y menos con ella, así que le sonreí y pretendí que estaba concentrada trabajando en algo. Muy a mi pesar la generosidad de mi coloc (1) y el control que tenía sobre todo se estaba volviendo un peso para mí. Era una dinámica de poderes donde yo tenía todas las de perder, donde sentía que no tenía mucha voz ni voto en nada por miedo a parecer desagradecida. Me di cuenta que desgraciadamente había convivido toda mi vida con ese tipo de dinámica, después de todo la infinita generosidad de mi abuela no podía ser solamente una virtud cristiana.  

Llega el momento del apero y yo hago Gin-tonics para todos. Todo el mundo está de buen humor para la cena incluida yo. Después de la cena tomamos la tisane (2) y compartimos una tableta de chocolate. Ellos empiezan a jugar la belote(3), que para mí es como una especie de póker francés, que intento entender y que Line se esfuerza por explicarme pero que parece que no está entrando en mi cerebro como debería.  Me conformo con asociarme con Line para ver sus jugadas y me digo a mí misma que algún día hare el debido esfuerzo de aprender a jugarlo sola.  

1 día antes del confinamiento:  

Abro Youtube para buscar el discurso de Macron.  Su voz y sus maneras pausadas hacen que pueda entender todo lo que dice.  En el minuto tres anuncia que ha decidido poner a la población en confinamiento obligatorio al menos por dos semanas. Dice que Francia está en guerra, me pregunto si habré entendido mal, pero lo repite varias veces. 

 — Estamos en guerra! —. 

Cierro la tapa del computador un poco confundida.  

Voy a la cocina por un vaso de agua y de la nada empiezo a hiperventilar. Agarro mi celular y escribo con manos temblorosas en Google: 

¿Qué hacer cuando tienes un ataque pánico? 

(1)coloccolocataire: Compañero de piso.  

(2) tisane: Aromatica.  

(3) belote: Juego de cartas francés. 

Si te gustó, ¡compártelo!

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.