Era invierno, Mayo se había presentado húmedo y lluvioso.  El Reloj de la Plaza Principal daba las 12:00 en punto de la noche;  nadie caminaba por las calles apenas se escuchaban a lo lejos algunas bocinas sonando sin parar, como avisando el querer llegar a casa pronto.

Era una noche oscura… si …..de esas que te da miedo el sólo pensar que debes salir de la seguridad de tu hogar, a las  húmedas y mojadas calles; porque a estas alturas, ya llovía torrencialmente.

María se puso el sobretodo, tomó un paraguas que tenía en un perchero y salió a paso firme como todas las noches a su trabajo como Mesera en un Restorant muy elegante, muy cerca de la Costanera. No estaba contenta con el horario que le habían dado, pero el único disponible, además en ese turno se trabajaba cuatro horas y ganaba más que los demás que trabajaban seis horas en el turno Día.

Ella tenía pensado trabajar unos meses hasta que pudiera alquilarse otro departamento al otro lado de la ciudad, dónde había visto mejores oportunidades de trabajo y en el horario que ella quería.

María, una chica de 26 años, rubia, de 1.75m, delgada y muy bonita; decían los que la conocíeron.

Pasaron un par de meses, todo iba bien, muy rutinario como siempre y tal como se lo escribía en sus cartas  a su madre que vivía en otra ciudad;    » Mamá acá todo va bien, como siempre, ya me queda poco tiempo para trabajar acá en este Restorant, pronto me iré a vivir a otro lado, donde tengo mejores oportunidades para trabajar en lo que me gust, que es el cuidado de los Abuelos,  en su casa Hogar. Te escribiré cuando ya me halla instalado en mi nueva casa; te mando un beso mamá, te quiero mucho».   Esta era la carta que había dejado en su mesita de luz para llevarla al Correos al día siguiente.

Faltaban diez minutos para terminar su horario de trabajo, terminó lo que estaba haciendo, se puso el abrigo, tomó el paraguas mientras se asomabapara ver si todavia continuaba lloviendo.  Eran ya las 4:00 am, abre su paraguas, se despide de sus compañeros, y sale caminando a paso firme calle abajo.

El Reloj de la Plaza daba las siete campanadas avisando la hora, una amiga golpeaba sin cesar la puerta del departamento de Mería, llamándola incesantemente. Al oir los fuertes ruidos, el vecino se levantó muy enojado, enfrentó a la chica que seguía golpeando y le preguntó:  —¿ usted está loca, que escándalo es ese? no vé que aquí hay personas descansando?,  la chica le contesta lo más calmada posible….me llamo Julieta y soy amiga de María y estoy muy preocupada por ella, golpeo y no contesta, no me abre….

—Bueno señorita– contesta el hombre—- mire si no le contesta ha de tener el sueño muy pesado o simplemente no llegó a su casa a dormir..

Julieta se queda pensando y muy preocupada le contestó:  mire,  Maria no es de quedarse fuera de su casa y menos a la hora que sale de su trabajo……. algo le pasó… insistía ella…. algo le pasó no tengo dudas, y mientras terminaba la frase  marcaba el número de la policía.    No tardaron más de quince minutos, el policía preguntó quién los había llamado…y Julieta contestó.. fuí yo, es por mi amiga Maria que anoche no llegó a su casa después del trabajo…….

dijo el policía —–¿ está segura que no se quedó en algún otro lugar, de algún novio u otra amiga?——No, le contestó  apresuradamente Julieta, mi amiga no es de hacer esas cosas, además la llamé a su teléfono y no contesta, …sé que algo malo le pasó….

—–Bueno señorita, no se adelante, deme los datos de su amiga y el numero de teléfono suyo, el lugar dónde ella trabaja y la tendré al tanto de lo que suceda.

—-Bueno oficial dijo ella,( mientras anotaba en un papel que había sacado de su cartera) aquí le dejos los datos que me pidió y mi número de teléfono para cualquier novedad que surja, le agradeció y se fué caminando a paso firme.

Ya habían pasado doce horas desde la desaparición de María, de repente, suena el teléfono, y lo menos pensado pasa……Julieta se deslizalentamente hacia el sillón…. mientras escuchaba la voz al otro lado del teléfono…..- Lo siento señorita… encontramos una chica con la descripción de su amiga, al costado de la carretera, muy golpeada y sin su cartera ni documentos encima, necesitamos que usted venga a la Morgue para ver si se trata de su amiga o no, ya que como le dije antes, no le encontramos documentos encima…..

—— Bueno dijo ella, ahora voy, mientras trataba de reponerse del estsdo de shock…

—– Entonces la esperamos, dijo el policía y cortó. Unos veinte minutos después, al llegar a la Morgue, mientras entraba, no quería pensar que esa chica fuera su querida amiga… pero respiró hondo y pidió ver el cuerpo.

Un encargado la acompañó hasta el lugar dónde estaba la chica, elle la miró, rompió en llanto mientras asentía con la cabeza.

Enseguida salió de allí y en la puerta la esperaba el policía, la miró y no hizo falta que ella le dijera nada.  El oficial le preguntó: ¿ sabe usted señorita si la chica tenía algún pariente para avisarle? , Ella asintió con la cabeza y dijo si, su mamá que no vive acá, ….. déjeme que yo le avise…  ah!! una pregunta más oficial, sabe si a María le hicieron algo…..?

——No señorita, no le hicieron nada, parece que solo fué para robarla…  Julieta quedó pensativa y dijo…  Pero si ella no tenía dinero, recién le pagaban su salario la semana que viene!!!!, se dió media vuelta y se fué rápidamente.

Ya ha pasado un año de lo sucedido, Julieta extraña a su mejor amiga, y pensando hasta el día de hoy….. ¿ por qué tanta maldad hacia María? si ella era una muy buena hija y una gran amiga…..  Te quiero mucho AMIGA