Nunca me perdonare por lo sucedido…
Sus bellos ojos tan brillantes como la estrella Deneb, su boca tan dulce como aquel chocolate que Willy Wonka quisiera vender, el cabello deseado por cualquier mujer, corazón valiente y honorario visto ni por el mas fuerte soldado solitario en guerra luchando…
Pero la unión que junto con ella se había ido desarrollando, lo deja perplejo y arrodillado, y en eso se queda mirando, pues visto como iban las cosas yo también lo haría al ver tremenda pareja en un camino de minas que con el mas fino toque explotan…
Oh bueno eso se veía, hasta que ellos aprendieron que nada es invencible que tarde o temprano su vida cambiaría, los obstáculos con ellos podría y su vida amorosa se derrumbaría…
Maldición que rabia la cabeza explotaba las deudas que con su sueldo no alcanzaba, nada de fiestas ni de salidas también esta semana, a trabajar duro a ver si los problemas se acaban, lastimosamente esto llevo a la pareja a una decepción, su amor ya no era gozo para ninguno de los dos, un día el chico se emborracho e hizo cosas que ella nunca le perdono…
Si emborracharse sabiendo la situación de las cosas no era suficiente ser infiel a tu pareja era sobre-excederte…
Se fue de la casa para no regresar. al día siguiente el chico la buscaba por toda la ciudad, nadie la había visto, nadie la conocía no había rastro de ella hasta la llegada del medio día.
Prendió la televisión y puso el noticiero lo que transmitirían ahí era algo que el no podía ni creérselo, vio a aquel mujer que tanto amaba adentro de una ambulancia, victima de un asalto que no se esperaba y al ver que no tenia nada el maldito la acuchilló de rabia…
El chico con toda prisa va al hospital para ver a su amada sin contar con la lamentable noticia que le esperaba…
Cuando llego a la puerta de la habitación justo vio salir al doctor, hablo con este y este le notifico que la mujer iba a fallecer y no se podía hacer nada para salvarla de su lamentable destino…
El día terminaba y yendo a casa sintió que en su vida ya no había ninguna esperanza, llego a su tejado y desde esa gran altura no se la pensó dos veces y salto de una.
Para comentar debe estar registrado.