Caminando por la vida tropezando y levantando
Nuevamente mi rodilla una y otra vez.
Con el alma entristecida, el corazón sangrado y adolorido
Mi pena no encuentra una salida y vago por el limbo de lo incierto
Buscando un alivio para este cuerpo.
Él es mío sabes por qué, porque está en mi vida, porque está en mi lecho…
Mía su sonrisa, mía su sonrisa, mía sus caricias
En sus brazos descansa su agotado pecho buscando ternura,
Buscando mí aprecio.
Él es mío, en la ausencia y en la distancia…
Mío hasta el final del tiempo ausente o presente.
Mire alrededor de un mundo transparente, solo observable frente a la única ventanilla que mi habitación tenia.
Nosotros veníamos desde ese lugar, alrededor del universo que creamos, aunque solos en un único mundo habitable, fascinados por el camino que tomamos, sinceramente tan deshonesto, fascinados por nuestras voces, aquel sonido contradictorio que echábamos tanto de menos.
En ocasiones pienso que por cada mes, y por cada segundo que vivimos, las palabras equivalen a cada cosa que gastamos, difícil seria que mi sarcasmo fuera prohibido; la única arma que me queda que al paso del tiempo fortalezco.
Aunque nadie mueva a esta Tierra, esta Tierra es incapaz de mover cualquier cosa, existente o no en el campo visual de mi propio ser.
A UN ADIOS ANUNCIADO
No te veo, pero sé que estás cercana.
¿ Llegarás como el amor, sin previo aviso,
o te complacerás destruyéndome de a poco,
hasta que yo vencido diga basta?…
Qué absurdo, pensarte fuera mío,
si estás en mí y haz de marcharte, vida..
Sí, así como el amor que se termina,
un día vos te irás sin avisarme.
Yo cerraré los ojos sin llorarte,
sin decirte un adiós, sin sentir pena
ausente de todos los sentidos
dejándote marchar sin retenerte.
Como si fuera de común acuerdo,
pero es mentira. Yo te quiero tanto…
neco
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