Archivo de la categoría: Poemas

La Dama ( La Vida De Una Hermoza Mujer)

La Dama miraba en la noche clara, la belleza de la luna
y observa la metamorfosis del las aguas del lago,
Mira a la luna sumergiéndose en su belleza,
mezclándose con aquellos rayos de plata que la acarician.
como si fuera el mejor de los amantes.
Su largo vestido blanco con las huellas de su vida,
se desliza suave, cual velo de seda,
entre las millones partículas de arena.

O dama de blancos cabellos,
que llevas en tus manos las huellas de tu vida,
en tu cuerpo el deseo de la belleza eterna,                                                             en tu vientre la historia sin final, del sueño mas hermoso y el milagro mas brillante que el destino te arrebato y dejo en la historia de tu vida la mas grande pagina negra  que nunca pudiste arrancar y en tu alma el mas puro amor lleno de deseos que no pudiste acabar.              El amor de aquel caballero que disfruto de tus años mozos,                     de tu encanto de doncella y placeres de una mujer embellecida             por la experiencia pero que ahora, eres el mas dulce recuerdo, que en los  brazos de el quedo pasmado impregnado de tu dulce aroma.

O dama quien mas que tu, sabe el dolor que sufriste y que desgarro tu alma, llevando consigo tu dulzura , sueños y añoranzas                      de  aquel hombre que alegro tus días tus noches y tus albas.                    Dejando marcas que ahora estan latentes en el apogeo de tu vida.
Observando sus recuerdos, una lágrima brilla.
La luna, transforma las aguas en hilos de plata,                                    mostrándole a la dama que su camino dorado habia terminado.              Sus pies se tiñeron de plata, la dama acepta la invitación de la luna, con sus recuerdos se sumerge en las aguas de plata para quizás volver y encontrar a aquel caballero,                                                                  que la ayudo a desplegar sus alas

La Dama

 

Perfil

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Universo

Viajo por el equinoccio del sol

donde la luz recorre el eco del universo

Busco la voz de la esperanza

el llamado del viento

porque soy el alma del mañana

La poca distancia que alcanzan los cantos azules del mar

se han ido

mientras acojo el silbido huérfano

que respira la bifurcada caricia del aguacero

A veces si a veces bebo de los manantiales

aquella sabia divina que se diluye a cántaros

cayendo dos veces del confín de la eternidad

Dos veces que el futuro se presenta con sus manos abiertas

para luego cantar la danza imperecedera del sentimiento

Pero a pesar de todo

el cosmos del imperio se disipa por los espasmos

Para volar entregando nuevos continentes

al planeta inquieto de agua

La voluntad contraria

Que navega por los infinitos del firmamento

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Que Seas Feliz

Letras de cancion
Letras de cancion
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Qué seas feliz
Por: Saraba

Todos juran que eres feliz,
Los que te han visto por ahí;
Que nada tienes que decir,
Te delata,n tu reír.

Tú mirada expresa más ,
Con ese brillo especial;
Y aunque yo ya no viva en ti,
Me alegro, me alegro, que sea así.

Coro
Qué sea feliz, donde estés,
Que seas feliz, una y otra vez;
Que seas feliz, cada día más
Aunque yo aquí, muera en soledad.

Que irradia felicidad,
con donaire y sin rubor;
Que brota de tu corazón,
La magia que da, el merecido amor.

Coro
Que seas feliz, donde estés
Que seas feliz,una y otra vez;
Que seas feliz,cada día más,
Aunque yo aquí, muera en soledad. (Bis)

Que seas feliz…

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Mi Alma Descansa En Ti

Mi alma descansa en ti

     En mi ahora eres como ese retazo de cielo celeste que asoma entre densos nubarrones, y tu cerúlea promesa guía mis ojos nubosos, dudosos, celosos.

    Mi alegría remonta vuelo con tu aliento, y declina, estrepitosamente, cuando mitigas la respiración.

Eres paciente, oh amor, dulzura te llamas; me levantas una y otra vez; suspiras verdad sobre mi corazón receloso.

Pacificadora de búsquedas desesperadas, tu presencia es para mí como a las ovejas el silbido del pastor.

Bajo tu halo de pureza yo quiero ampararme, mujer, y así las tinieblas de mi vida espantar.

Mi alma se abreva en las aguas de tu río.

Y en tu río vislumbro el sendero que lleva al Mar.

 

Autor: Marco Senn

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EN LOS DÍAS DE MI INFANCIA

¿Quién no recuerda esa hermosa etapa de risas, sueños y esperanza en un futuro mejor?

La verdad yo sí; en mi pequeño mundo donde no podía moverme a voluntad,

pero mi mente me daba la oportunidad de imaginar, jugar y divertirme.

 

Mis padres me amaban, me cuidaban y me protegían,

yo era feliz; vivía entre flores, viajes y televisión,

el nacimiento de mi hermana me alegró la vida; por así decirlo,

me sentía sola y ella se convirtió en mi compañía.

 

Siempre me sentí incompleta,

pero mi hermana en su inocencia,

supo ganarse mi cariño,

y se transformó en mi complemento.

 

La llegada de mi hermano fue una verdadera sorpresa,

prácticamente fue como un milagro de Dios,

un milagro convertido en una bendición que alegró nuestras vidas,

que llegó para quedarse y ser parte de nuestra felicidad.

 

Dios ha estado conmigo en toda mi niñez,

acompañándome con su amor,

guiándome con su infinita sabiduría,

y bendiciéndome en cada ciclo de mi vida.

 

 

 

 

 

Por: Erika E. Cuenca A.

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