Archivo de la categoría: Poemas Románticos

No Quiero Pensar En Ti

No quiero pensar más en ti. Me duele pensar en los momentos tan hermosos que pasamos juntos. Duele saber que ahora eres feliz sin mí. Duele saber que la felicidad que tienes no lleva registro alguno de tantas aventuras que vivimos.

Has olvidado la vez que tropecé al lado del verde maizal, ensuciando mi camiseta y pantalón blanco. Has olvidado las carcajadas que soltamos ese día, tan fuertes que los pobres sordos no tuvieron más remedio que taparse los oídos.

Olvidaste que te entregué mi amor. Me entregué a ti con todo: con lo bueno y también con lo malo de mí ser, para que juntos viéramos los errores y hacer todo lo posible por corregirlos. Me entregué a ti sin saber quién eras. Me entregué torpe, ignorante y ciegamente, confiando en la paz que me hacías sentir y que nadie más pudo despertar ese sentimiento en mí. Me entregué a ti sin prestarle atención a la razón.

No sé cuál es mi misión en este mundo sin ti. Te lo he dado todo y ahora no tengo nada. Estoy tan vacío que la sangre en mi corazón hace ecos insoportables e interminables, creando sonidos extrañamente  escuchados, golpeando cada vez más fuerte las paredes de mi debilitado corazón.

Quizás pueda confortarme con saber que he sido quien te avivó todas tus emociones guardadas en el interior de tu alma desconsolada.

Si te gustó, ¡compártelo!

Una Poesía Para Ella

Esto es lo que siento por ti cada dia, http://cuanto-daria-amor

esperando por tu recuerdo entre mi pecho, cortando el viento con mis palabras, besando tu silueta en mis pensamientos y vertiendo de tu amor en mis sentimientos,

mirando en el extenso cielo tu figura en el universo, escribiendo en mi piel tu nombre y enredando en mis dedos tus hermosos cabellos

mujer preciosa, perfecta creación, que inspiras mi corazón y construyes de tu amor en mi cuerpo, me tayas con tus palabras

me cambias el corazón y penetras en lo más profundo de mi alma, te adueñas completamente de mi, derramas de mis pensamientos todas mis poesías, me haces vivir enamorado completamente de ti,

no encuentro palabras para esta locura, para este cuento largo y extenso, donde tu eres mi perla de mar y mi princesa.

 

Si te gustó, ¡compártelo!

Perder La Batalla

 

Me confundes, me revuelves los sentimientos y de pronto hay un terremoto en mi corazón, sacudiendo y agrietando todo a su paso. Creo tener todo bajo control, pero ¿realmente lo tengo? Si aún estás en el centro de mi mundo. Siento que estoy cada vez un paso más cerca de tu alma, pero quizás solo sean mis ilusiones flotando en el aire que respiro, porque el sueño de tenerte parece ficción. Aún tengo miedo, no puedo negártelo, temo estar sobre valorando lo que siento. De lo que sí estoy segura es de salir ilesa de un hipotético rechazo, porque de tantas caídas he aprendido el arte de ser indestructible. Así que venga, hazme mierda con todo lo que tengas, podré soportarlo; pero dime que eres mío y me derrumbaré en tus pies, perdiendo la batalla que creía ganar mientras juraba a los cuatro vientos que el destino junto a ti no fue hecho para mi.
Si te gustó, ¡compártelo!

Adictos



ADICTOS

Tu forma de quererme es 
conflictiva y misteriosa. 
Me quieres hoy y mañana 
me ignoras.

Eres real porque me miras 
con admiración, me abrazas 
con temor y me besas con 
adicción.

Le temes al amor pero 
aquí estas, le temes al 
amor pero sientes 
atracción.

Pero aun así amas tu 
soledad, ¿Por qué?.

Amas tu soledad porque 
respeta tu silencio, tu 
tiempo y espacio, mientras 
que yo solo respeto tu 
estado complicado.

Amas tu soledad por 
infinitos motivos, pero 
a mi me quieres porque 
te hago sentir vivo.

Eres un adicto porque 
amas tu soledad pero 
eres adicto a la felicidad.

La soledad es tu tranquilidad 
y mi compañía tu estabilidad.

Pero no eres el único adicto. 
Yo soy adicta de tu ser y 
querer. Te quiero con tu 
soledad y toda tu complejidad.

Somos adictos por necesidad. 
Necesidad que solo estando 
juntos podemos suministrar.

-Ssc.
Derechos de autor reservados.
Si te gustó, ¡compártelo!

El Momento Dorado

¿Recuerdas aquel momento dorado?

Fue tan aleatorio como escribir lo que ya había borrado

Tus expresiones explícitas y clasificadas

Se guardan en un cajón de numerosos segundos

Los viví en ocasiones moribundo

Desvelado en las noches, queriendo ser oriundo

De tu simplicidad vestida de egocentrismo

Quería a mi virilidad en el fondo de algún abismo

Quería tu carne pero no quería atraerte por lo mismo

Si la merezco que sea por mis instintos

Si me mereces que no sea por conformismo.

 

 

 

Si te gustó, ¡compártelo!