en la distancia yo te miro
te admiro y te deseo
te recuerdo y te bendigo
en cada instante de mi vida
sin ti seria una agonia
sin ti siento que moriria
no es necesario decir adios
porque algun dia nos
volveremos a ver
y por siempre te recordare
Cuando pudo el sol
estrenar sus ojos,
tú estabas de hinojos
llenos de amargor.
Cuando pudo el viento
besar sus mejillas,
fulgor que no brilla
fue tu sentimiento.
Cuando rasgó el llanto
la noche callada,
vigilias doradas
de amor y de encanto.
Cuando sonreía
tu alma lloraba,
tus labios cantaban
himnos de alegría.
Cuando te miraba,
soñaba tu alma:
tormentas de calma
que te desbordaban.
Cuando se marchó
tus ojos brillaban,
dos perlas bailaban
en tu corazón.
Y cuando ya el sol
no luzca a tus ojos
tendrá muy guardados
en pecho cerrado
tu blanco dolor,
tu sentido amor…
No quiero manchar de rojo mis versos,
no, ni de rojo ni de negro.
Y no quiero, no, que corran su tinta
borrones de lágrimas mías.
No quiero tampoco que queden muertos,
jamás leídos, no, no quiero.
Que no los quiero corridos ni muertos.
No los quiero rojos ni negros.
Los quiero como unos ojos azules
o blancos, como blanca nube,
fuertes,alegres, sin dudas, sin miedo
a la vida, mirando al cielo.
Y mirando al cielo sin miedo a nada
que pudiera romper el alma.
Por eso quiero mis versos alegres
y blancos, azules y fuertes.
Porque ellos son para ti, yo los quiero
como son… pues que son mis versos.
Andres era un chico muy travieso, que no podía estarse quieto en ningún lugar, su abuelo le regalo un perro para que se distrajera un poco y olvidara sus travesuras, el niño lo llamo mateo, e inmediatamente se enamoro de esta linda criatura, lo mimaba, lo bañaba, lo peinaba y jugaba todo el día con el, cierto día lo llevo al parque a caminar cuando de repente se le acerco un chico muy malo que era el terror de los niños y le arrebato a su perro y comenzó a correr, andres estaba tan asustado que intento alcanzarlo pero era demasiado tarde.
se fue a su casa muy triste , subió a su cuarto y no dijo nada, no quiso comer ni hablar con nadie, su abuelo se sintió un poco extrañado pero no dijo nada, Andres sabia donde vivía aquel chico pero sentía miedo de ir hasta ese lejano lugar, estaba demasiado triste, le hacia mucha falta su amigo. pensó y pensó y llego a la conclusión que debería ir en busca de Mateo, pero tomo la decisión de no decirle a nadie porque tal vez tratarían de impedírselo, guardo una linterna y unas pocas golosinas en su mochila, se coloco un saco y salio despacito sin hacer ruido, camino aprisa por las calles de su barrio, poco a poco se fue alejando de su casa, pero cuando mas se alejaba mas miedo sentía, aunque trataba de ocultarlo, la noche se acercaba y Andres seguía caminando, en unos pocos minutos diviso la casa de aquel chico malo, se acerco un poco a su jardín pero un perro enorme lo hizo salir corriendo, no sabia que hacer hasta que miro un frondoso árbol y decidió pasar la noche allí , seria mas seguro tratar de entrar al día siguiente bien temprano, trepo al árbol y espero hasta el ida siguiente.
Muy temprano bajo del árbol, el perro grande estaba dormido y de repente andres se dio cuenta que la ventana de un cuarto estaba abierta… se acerco lentamente , pero por poco se devuelve porque escucho un ruido como de un león pero recobro la calma y se dio cuenta que era aquel chico que estaba dormido haciendo unos raros sonidos, suavemente entro por la ventana con el corazón en un hilo y caminando en la punta de los pies, atravesó aquel cuarto todavía un poco oscuro y al frente diviso otro cuarto abrió la puerta con mucho cuidado y vio un gran numero de perros encerrados en muchas jaulas, no tenían ni agua ni comida, busco por todos lados cuando descubrió a su amado Mateo con mucho cuidado abrió su jaula y luego todas las jaulas de los demás perros, pero un perro muy chico no pudo contener su emoción y emitió un suave ladrido.. bueno no tan suave, porque despertó aquel chico malo, quien se percato de lo que estaba ocurriendo y se abalanzo sobre Andres, pero los perros agradecidos no permitieron que esto ocurriera todos al tiempo se lanzaron sobre el chico malo y este cayo al piso, todos los perros saltaron por encima de el y se dirigieron rápidamente a la puerta guiados por Andres, todos salieron de la casa y corrieron en diferentes direcciones, lo mas importante era espacar de aquel horrible lugar, mateo junto con su amo corrieron sin parar hasta llegar a su casa.
el abuelo de Andres estaba muy preocupado apenas se había dado cuenta que su nieto no había pasado la noche en la casa y había llamado a los padres de Andres quienes ya se dirigían a toda prisa a casa del Abuelo, el niño le explico al abuelo todo lo que había sucedido y de que manera había logrado salvar a su pequeño amigo, su abuelo se sintió muy conmovido al percatarse de los bonitos sentimientos que tenia el niño hacia su perro, pero de igual manera lo reprendió porque un niño no debe hacer las cosas sin pedirle ayuda a sus padres porque puede ser peligroso para ellos.
desde aquel día Andres ha cambiado mucho se porta muy bien con su abuelo y cuida mucho a su perro, pero jamas sale a la calle sin pedir permiso porque no quiere darle mas preocupaciones a su querido abuelo.
El azulejo, era un hermoso pájaro recién nacido que vivía en un un frondoso árbol, en un nido de paja construido por sus padres, solo se preocupaba de comer y dormir. cierto día un leñador caminaba por el bosque y diviso el frondoso árbol y pensó: es bastante grande me dará mucha leña, saco su hacha y comenzó a cortarlo, los azulejos salieron de su nido y revoloteaban tratando de impedir que el leñador cortara su árbol, pero fue inútil poco a poco el árbol cayo y azulejo pequeño cayo demasiado lejos y quedo muy malherido. sus padres lo buscaron pero no lograron encontrarlo.
al día siguiente Maria una pequeña niña que vivía cerca del bosque salio a caminar como tenia costumbre, cuando depronto escucho un suave ruido y decidió acercarse, grande fue su asombro al ver al pequeño pájaro se acerco despacito y lo tomo suavemente en sus manos, lo observo intensamente y vio como un hilo de sangre salia de una de sus alas, lo llevo a su casa y se lo mostró a su mama ella le ayudo a vendar su ala y hacerle una rápida curación, su madre le recomendo que le diera un poco de pan y un poco de agua, el azulejo estaba muy débil pero con el pasar de los días se recupero, Maria le compro una linda jaula y dos vasijas para el agua y la comida, todos los días lo visitaba y se sentía afortunada por tener un amigo a quien querer y cuidar, pero la pequeña niña notaba que su querido amigo estaba triste, le pregunto a su madre que podría ocurrirle al azulejo, su madre le dijo: hijita querida los pájaros aman volar, les encanta la libertad, pero mama el tienen una linda jaula y comida y yo lo quiero mucho, es cierto replico la madre pero el decea estar el bosque con sus amigos y familiares. la niña lo pensó largamente, entendió que lo mejor para el era estar en su amado bosque. al día siguiente lo llevo y lo dejo cerca del árbol donde lo encontró el pájaro la miro con dulzura y emprendió un suave vuelo hacia el cielo divisando los lugares que desde ese día serian su nuevo hogar.
la niña regreso a su casa un poco triste pero en su interior estaba feliz porque entendió que no había nada mas hermoso que la libertad y respirar el aire puro del hermoso bosque.