DIA 1

Eran las  cuatro de la mañana, se baño, se vistió, se puso el uniforme blanco impecable sin arruga alguna, tomo su desayuno: una taza con café bien cargado y un pan tostado con mantequilla, nada nuevo en ese día.

Como de costumbre llego al cuarto para las siete, saludo al de intendencia que apenas  iba por la biblioteca.

-¡Ahora le gane señor!-  dijo con gran emoción.

El señor se limito a asentir con la cabeza y siguió trapeando.

Claudia al ver que no provoco ni una reacción en automático se le borro su sonrisa y continúo su camino.

Este día fue igual que todos lo único diferente y emocionante fue ganarle al señor de intendencia. Así pasaron los días…un día tuvo un toque de emoción en lugar de ponerle mantequilla esta vez le puso mermelada.

DIA 2

Hoy… fue todo diferente, en la materia de anatomía les pidieron que hicieran una exposición sobre las  diferentes partes del cuerpo.

Y esta vez el equipo no fue diferente, fue integrado por los 4 amigos de siempre y como era de esperarse la que organizo todo, la que “repartió” los temas y más fue Claudia.

-Espero un diez eh!-dijo en tono amenazador Emanuel.

Claudia solo hizo media sonrisa y se agacho a leer los requisitos de la forma de trabajo.

Esta vez su semana si estuvo emocionante pues todos los días su ulcera causada por el estrés crecía más y más, por un lado la presión del trabajo, la presión de su novio que era la envidia de todas y la presión de la familia.

Que días estos los que ella vivió… nadie hubiera querido estar en sus zapatos.

Apenas termino de exponer y el profesor les dijo que tenían un diez; Claudia se desmalló, su desmallo fue causado por el estrés y el haberse mal pasado en alimentación y horas sueño en estos días, estuvo fácilmente como cuatro días en el hospital los cuales solo fueron llenados por las rondas de las enfermeras, la controladora de su madre y el obsesionado de su padre:

-Ay Claudia con esta desmallada te has perdido horas de clase muy importantes pero ya hable con tus profesores y te van a dar clase particular-dijo su madre mientras hacia una llamada por celular.

-Claudia si pierdes la beca…-dijo su padre sin terminar pero solo bastaba con ver su mirada para ver que a Claudia le llegaba la hora de su Apocalipsis.

De nuevo a la escuela , esta vez su novio la estaba esperando en la puerta con un gran ramo de flores…

<¿Y ahora a este tipo que le pasa?, se lo he dicho un millón de veces  no me gusta que me den flores>pensó Claudia antes de llegar al encuentro.

-Hola amor ¿Cómo sigues? Toma te traje tus favoritas-la abrazo.

Claudia hizo media sonrisa-¿Por qué no fuiste a verme?

Pensó mucho su respuesta-Pues no quería molestarte

<Si claro y yo me chupo el dedo, seamos sinceros corazón solo andas conmigo para sentarte junto a mí en los exámenes como lo hacen los demás >

Una brillante idea…

DIA 3

De nuevo nada nuevo en los días de Claudia, su vida (para los demás) era perfecta, ella era linda tanto física como en carácter además era muy inteligente, tenía carro del año, su ropa era de portada de revista y además  tenía  unos padres exitosos, un novio de película y unos amigos fuera de serie.

Pero nadie sabía cómo se sentía ella por dentro; tenia sentimientos encontrados, por un lado no se quería quejar  de su vida ya que sentía que estaba siendo una malagradecida, pero por el otro ella se sentía en una jaula.

Un día en la clase de farmacología…

-El medicamento Mediator, píldora utilizada para la diabetes y bajar de peso, genera problemas cardíacos con el  principio activo anfetamínico benfluorex.-dijo el profesor;  ese medicamento le llamo la atención a Claudia

-¿Puede generar la muerte?-dijo una tipita

-Si tiene el ingrediente activo benflourex es muy probable ya que en España se retiró del mercado en 2008 y en Francia un año después…

Claudia dejo de escuchar al profesor  y empezó a escribir…

Si alguien encuentra esta nota es porque están empacando mis cosas porque ya deje este patético mundo… y como es de esperarse mi madre quiere usar mi cuarto para que sea su cuarto… en fin  quiero que me cremen , toda mi vida estuve en una caja no quiero que me entierren en una.

La doblo en cuatro y la guardo en la bolsilla de su bata, cuando la guardaba  la acaricio y le dio unas palmaditas como asegurándose que no escapara  y sonrió , como si esa idea que se estaba maquilando en su cabeza fuera la mejor que hubiera tenido.

DIA 4

Claudia ya estaba planeando que día y con quien conseguiría esas pastillas, pero un suceso inesperado hizo que todo diera un giro de 360 grados.

Iba saliendo de la escuela y antes de subirse a su carro recibió un golpe en la cabeza.

El zangoloteo de la camioneta en la que iba fue lo que la despertó.

-¿Qué pasó?-dijo entre dientes y tratando de incorporarse.

-Despertó- dijo un hombre con barba

-Tápale la boca-ordeno el chofer.

-¿Para qué? si apenas puede hablar-dijo el de barba

-Que se la tapes idiota no te estoy preguntando.

No queriendo el señor de la barba le tapó la boca y antes de hacerle el nudo le dijo que si estaba muy apretado, Claudia temerosa y sorprendida negó con la cabeza.

Llegaron a una casa abandonada, ella logro reconocer el rumbo por el que andaban, estaban a 20 manzanas de la suya. Pensó en escapar, pero por primera vez sintió lástima , y fue por el sujeto de la barba, ella sabía que si se escapaba o hacia algún movimiento extraño el que iba de chofer y presume ser el líder sería capaz de matar al señor barbón .

-No le vendaste los ojos animal-dijo el chofer al abrir la portezuela de la cajuela y ver a Claudia.-Métela a la casa a ver si  puedes hacer eso estúpido .

El barbón ayudo a Claudia a bajar de la camioneta y la llevo al interior de la casa.

Antes de bajar unas escaleras situadas en la cocina…

-Aquí te voy a pedir que cierres los ojos-le pidió el barbón en tono dulce.

Ella los cerro, el todavía le movió la mano para ver si en realidad ella los había cerrado. Bajaron esa escalera parecía que no tenía fin.

-Aquí te quedas, no hables ni grites al rato a ver si te puedo traer algo de comer, te cuento tres y te puedes quitar la mordaza y abrir los ojos, asiente solo con la cabeza si me escuchaste.

Asintió.

-Tres.

Abrió los ojos y parecía que estaba en una mazmorra, todo húmedo y lleno de musgo. La puerta era de madera y tenía una pequeña rendija, se asomó y había más celdas, y entre sombras vio movimiento en el interior de cada una de estas…

¿Libre?…

DIA 5

¿Qué día será hoy?-se preguntó Claudia en voz alta.

-Es viernes-le contesto el señor barbón llevándole comida.

<Sólo una semana ha pasado, creí que había sido más>pensó.

El señor barbón le dejó su comida y le dijo que se la terminara.

Claudia confiada se la comió, al terminar se sintió mareada, no sentía mucha fuerza en los brazos y piernas, la vista se le empezó a nublar, en eso de nuevo el señor barbón entró la tomo del brazo y la llevó a una especie de sala (igual de húmeda y lúgubre) donde había mas tipitas sentadas y amarradas en unas sillas de madera, solo faltaba Claudia.

Todas drogadas y como podían empezaron a intercambiar palabras, unas llevaban más de un mes en ese lugar y todas estaban en buenas condiciones, no sabían el porqué de su estancia .

-Señoritas , podrían guardar silencio-dijo una voz que venía de la penumbra.

Poco a poco se empezó a ser visible la silueta, era un hombre que llevaba un antifaz , pero aun sin verle la cara era atractivo, su voz parecía la de los mismos ángeles, su aroma era seductor.

Pero al igual que toda tentación atractiva pero letal este no podía ser la excepción…

DIA 6

Este hombre tan misterioso y cautivador para todas fue su perdición, nunca antes se les había presentado estaba esperando a que su colección estuviera completa y Claudia fue su última pieza.

Todas contaban con un patrón: eran mujeres universitarias ,su edad oscilaba entre los 18 y 23 años, todas ellas guapas con algún rasgo impactante como lo eran los grandes ojos, cabellera sedosa, buen cuerpo o una sonrisa de ensueño, pero todas ellas brillantes en algo que ellas no sabían que lo eran pero el sí, todas ellas libres pero cautivas a la vez el(creía) las haría libres…

Pero para dejar de ser simples mortales como el las llamaba tenían que cumplir con ciertas tareas.

Tareas sencillas pero difíciles de llevar a cabo por voluntad, (espero dejen volar su imaginación, ya que sería  vulgar, fuerte, y atrevido poner dichas tareas.)

Pero a pesar de todas esas tareas, violaciones y cosas detestables que les pasaban a estas mujeres Claudia nunca se había sentido más libre que estando ahí.

Y uno se  atreve a decir que era el mismo sentir de todas las chicas, ya que a pesar de los rasguños y moretones que adornaban sus caras y cuerpos aun en los ojos se les veía una sonrisa.

A Claudia no le iba tan mal como a las demás y no porque fuera muy obediente y diestra en la ejecución de todas las tareas , no le iba tan mal porque siempre tenía una buena obra de arte que mostrarle a la tentación.

Tanto tiempo muerto le dio a Claudia la habilidad de hacer esculturas de lodo, al principio hacia órganos vitales ,pues era de lo que más se acordaba ,después empezó a hacer esculturas sobre monumentos representativos de los lugares que le gustaría visitar.

La tentación complacida por la habilidad de Claudia le daba más oportunidades que a las demás , pero también se ponía más exigente…

DIA 7

La exigencia de la tentación puso a prueba a Claudia, hubo días en los que ella se empezaba a dar por vencida y mas cuando una de las mujeres que estaban ahí murió a golpes .

Cualquiera que hubiera visto esa escena hubiera sentido un nudo en la garganta, cerrar los ojos y puños y sin pensar írsele encima al tipejo ese, y claro que todas lo sintieron pero que hacer ,esa escena les recordó que estaban ahí atadas de manos y pies y que la siguiente podía ser cualquiera de ellas.

Claudia quiso ser la bocera de todas y creyó que la mejor forma de hacerle entender a la tentación que se estaba pasando de listo era dejando de hacer todo tipo de obra de arte, esto solo enfureció más al tipito este y fue acabando una por una de las demás hasta que solo quedo Claudia y otras dos.

Las otras dos le suplicaban a Claudia que ya hiciera algún dibujo o le susurrara algún soneto.

Claudia le gustaba sentir esa adrenalina de retarlo ,pero esta vez se le paso la mano y el por primera vez supo canalizar su furia y su enojo con la persona adecuada, empezó a golpear a Claudia.

Se escuchó un crujir, había sido su nariz. Se escuchó algo hueco , había sido una patada en el abdomen. Se escuchó rasgar, había sido su piel raspándose con el piso y pared.

Cualquiera hubiera pensado que esa golpiza la mato , pero no una extraña fuerza la mantenía, y aunque suene extraño esta golpiza hizo reaccionar a Claudia, se puso a dibujar en la tierra .

Esa fue una verdadera obra de arte la sangre fue el color  perfecto para una mermelada , y por primera vez Claudia sintió que su alma , su espíritu y ella eran uno solo. Sintió como los planetas se alineaban en cada trazo, sintió que si moría en ese momento un mundo artístico la esperaría y que por fin ella existiría…

 

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